
Porqué salen de tus manos como naves blancas
que surcan el mar de fuego del comal
hinchan su vela parsimoniosa
para derivar sobre la ruta de mi infancia:
Mi abuela
también de manos diestras
ordena el mundo de las cosas posibles
los sueños caén en el surco que el arado rotula
sobre la tierra húmeda
ese manto de escritura sólida
germina en espigas festivas
que yo te dejo aquí
cuando la primavera se resguarda
bajo el ala verde de la palma
y desmadeja su canto
con fervor
celebrando la vida.
2 comentarios:
Me gusta tu canto
orfico
y polimorfico
a las proletarias
tortillas de maiz.
ahora estoy metido a órfico, mañana cristiano y pasado oficiante de eros, tu sabes como cambian las estaciones de la poesía, en un abrir y cerrar de ojos.
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